sábado, 10 de marzo de 2012

Coca como medicamento

La Paz– El presidente Evo Morales anunció que viajará a Viena para defender ante la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas la masticación de hojas de coca en el marco de una campaña, hasta ahora infructuosa, para legalizar esa práctica muy común en esta nación andina.

Morales no descartó volver a masticar la hoja en la audiencia del lunes en la capital austríaca como lo hizo en 2010. ``Siempre pijchamos (masticamos) en todas partes, es normal'', dijo al anunciar su viaje.
Lo acompañarán el ministro de Defensa, Rubén Saavedra, y dirigentes de productores de coca de una región del norte de La Paz donde el cultivo es legal.
En tanto, organizaciones de cocaleros anunciaron ``jornadas de acullicu'' en varias ciudades desde el domingo para acompañar las gestiones del mandatario.
La masticación de hojas secas de coca (acullicu) es común en varios países andinos y es reivindicada por Morales como una práctica cultural que no es nociva. Pero una convención de las Naciones Unidas en 1961 incluyó a la coca en la lista de estupefacientes e instó a los gobiernos a erradicar los usos tradicionales, entre ellos la masticación.
Con 31.000 hectáreas sembradas, Bolivia es el tercer productor de coca después de Perú y Colombia. De esas, entre 12.000 y 20.000 hectáreas son plantaciones legales y están destinadas a usos medicinales, alimenticios y rituales. El resto es desviado a la producción de cocaína.
La masticación es practicada por indígenas y sectores populares de la población para combatir el cansancio, el hambre y los efectos de vivir en la altura. También tiene usos rituales.
La defensa de la hoja de coca ha sido la causa de las luchas de Morales desde los años 80 cuando comenzó a dirigir los sindicatos cocaleros desde donde saltó a la política.


(Seguramente la intención de Naciones Unidas es controlar el monopolio de la producción de hoja de coca como Carlos Slim controla los medios de comunicación en buena parte de centro y sudamérica, o como Televisa y Tv Azteca quisieran controlar otros medios, o como los capos -con infiltrados en el gobierno federal de México- desearan el monopolio absoluto del mercado de la droga, o como el Vaticano querría imponer su doctrina en el mundo, o como... Nota de AP tomada del Diario de Juárez.)