viernes, 31 de marzo de 2017

Antonio Orihuela (1965 )

Mi madre me estaba dando el pecho...



 Mi madre me estaba dando el pecho
cuando mi padre consiguió un trabajo
del que no se movió en treinta años.

Imaginó, que  a cambio de su fidelidad,
la empresa le gratificaría, cerca de su jubilación,
con un reloj de oro, una placa o un viaje a Torremolinos,
pero no, le dieron una patada en el culo
y a base de cambiarse de nombre,
resulto, que después de treinta años
mi padre no había trabajado allí ni treinta días.

Cada mañana, para el control de parados,
nos presentamos juntos en el INEM,

primero le nombran a él
y después me nombran a mí.
Hay gente que se siente satisfecha viendo a sus hijos imitarles,
me pregunto qué opinará él de todo esto.


("apología de la luz")

No hay comentarios: